Grecia tiene default y debe salir del euro.El debate real es cómo

Grecia se enfrenta a un desastre económico y social , el resultado de la llamada de rescate por la "troika" de la UE, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Central Europeo. 

Grecia debe cambiar de rumbo para evitar un futuro sombrío para su pueblo: debe pagar su deuda y salir de la zona euro.

Consideremos primero la magnitud de la crisis. Después de contraerse en 2009 y 2010, el PIB cayó un 7,3% más en el segundo trimestre de 2011. 

El desempleo se está acercando a 900.000 y se estima que superará los 1,2 millones, en una población de 11 millones de dólares.Estas cifras son una reminiscencia de la Gran Depresión de la década de 1930.

Las causas se encuentran claramente en el programa de la troika. A principios de 2010 Grecia estaba en bancarrota. En su sabiduría, la troika impuesto políticas de austeridad y la desregulación en consonancia con la ideología neoliberal de la UE. 

Bastante previsible, la demanda se derrumbó y el crédito bancario comenzó a escasear, por lo que el núcleo de la economía griega fue aplastado.

Las consecuencias sociales han sido catastróficos. Comunidades enteras han sido devastadas por el desempleo, la pérdida de los medios para vivir, así como las normas, las costumbres y el respeto del trabajo regular.

 El trueque ha aparecido entre los pobres y no tan pobres. Los servicios médicos en los barrios obreros se están quedando sin suministros básicos. 

Escuelas y el transporte se están desintegrando. La gente está abandonando las ciudades para volver a la agricultura, un signo seguro de retroceso social.

A medida que la recesión se profundizó, el programa no cumplió ni siquiera sus propios objetivos. El déficit presupuestario para 2011 está en curso el 10% del PIB, cuando el objetivo era ligeramente superior al 7%. El ratio de deuda respecto al PIB podría alcanzar el 200% en 2013, desde el 115% en 2009. 

Pero la troika se ha negado a reconocer el fracaso y en la antigua Grecia septiembre chantaje: adoptar nuevas medidas de austeridad o no habrá más préstamos. El gobierno se ha doblado, al presentar el equivalente de un impuesto fuerte sobre la propiedad. 

Una nueva reunión con la troika estaba prevista para hoy, después de lo cual no habría despidos masivos de funcionarios públicos, los salarios y recortes de pensiones, siendo mayor los impuestos indirectos, y así sucesivamente.

Estas medidas también son propensos a fallar: que se intensificará la recesión y se oponen políticamente. El gobierno de George Papandreou está aislado, y el partido gobernante ha perdido toda capacidad de generar apoyo popular. 

El oficial de la oposición, Nueva Democracia , ha sido crítico de las políticas de la troika, con la esperanza de obtener beneficios electorales. Los partidos de izquierda han pedido ya un desafío abierto y la falta de pago.

En la práctica, Grecia está al borde del incumplimiento y abandono del euro. Esta es la dura realidad, aunque ninguno de los grandes partidos está dispuesto a reconocerlo. 

La tragedia es que Grecia tiene una economía mucho más débil que en el 2010. Es probable, por tanto, que habrá gran agitación económica y social con resultados impredecibles.

Con los mejores intereses de su pueblo en mente, ¿qué debe hacer el gobierno? El primer paso sería la de por defecto, pero sin confiar el proceso a los banqueros, la UE y el FMI, ya que tenemos pruebas de lo que eso significa. 

Última Grecia julio acordó un intercambio de edad para la deuda nueva que podría reducir su deuda a los bancos en un 21%. Sin embargo, también tuvo que ofrecer garantías colaterales masiva a los bancos, con el resultado de que su deuda total podría en realidad aumentar. 

Aún así, muchos bancos no han aceptado este acuerdo muy favorable, con la esperanza en lugar de la devolución total.

Si el incumplimiento es de asegurar la cancelación de la deuda profunda, debe ser impulsado por Grecia y debe ser coercitivo en lo que los bancos están preocupados. Pero también debe ser democrático, basado en una auditoría independiente de la deuda para determinar cuánto puede ser ilegítimo. Grecia no está exenta de ventajas en este sentido. 

La mayoría de los títulos públicos están sujetos a la legislación nacional que significa condiciones de pago puede ser alterada a través de una ley del parlamento. 

Por otra parte, el "rescate" de los préstamos concedidos por la UE y el FMI puede ser declarada ilegítima por una auditoría independiente. 

El pueblo griego lo que podría recuperar un mínimo de respeto de sí mismo, salvajemente destruidas durante el último par de años.

El segundo paso sería para salir de la zona euro, pero de una manera que sería en el interés a largo plazo de los trabajadores, las empresas no grandes o los bancos. 

Contrariamente a lo que se afirma a menudo, Grecia no se vendría abajo si abandonar el euro. Después de todo, las uniones monetarias tienen una vida útil limitada, y en Europa es especialmente mal estructurado. 

La salida es la manera más sensata de Grecia para recuperar la competitividad y comenzar a recuperarse. La alternativa es continuar con programas de austeridad que no funcionan y se traducirá en disminución a largo plazo.

Un gobierno progresista que dar varios pasos decisivos: cambiar a un dracma nuevo rápidamente, nacionalizar los bancos, e imponer controles de capital. 

No tendría que ser medidas administrativas para asegurar los suministros de petróleo, alimentos y medicamentos, junto con los ingresos y la redistribución de la riqueza para apoyar a los más pobres. 

La recuperación debe comenzar dentro de unos meses, impulsado por la devaluación que permitiría a la industria para aumentar las exportaciones y recuperar el mercado interno. 

Si las fuerzas progresistas mostraron la suficiente voluntad, entonces sería posible transformar profundamente la economía, cambiando el equilibrio de poder en favor de los trabajadores.

Por defecto y la salida podría causar agitación internacional. De la deuda griega no puede ser lo suficientemente grande como para amenazar directamente a los bancos europeos, pero la banca mundial está en un estado frágil. 

Acción griego perturbaría los mercados secundarios de bonos soberanos, que puede conducir a una crisis mayor. Sin embargo, las autoridades de la UE tendría los únicos culpables, ya que sus políticas son, en efecto conducir a Grecia de la eurozona.