Verdades y mentiras sobre la conveniencia económica de adelantar elecciones

El presidente del Gobierno, José Luís Rodríguez Zapatero, fue tajante el domingo cuando descartó un adelanto de las elecciones generales. 

El motivo que esgrimió fue el negativo impacto que tendría sobre la economía, ya queimpediría completar las reformas que nos está pidiendo Europa, como la negociación colectiva y la definitiva reestructuración del sector financiero.

Sin embargo, los expertos quitan parte de razón a Zapatero y están divididossobre la conveniencia que tendría para la economía española un posible adelanto electoral. De hecho, hay tantos argumentos a favor como en contra.

Fundamentalmente, los defensores de convocar cuanto antes los comicios generalesesgrimen tres motivos: 

1-. Recuperar la confianza: El profesor de IESE, José Ramón Pin, se muestra tajante cuando afirma que "la lógica económica dice que deberían convocarse ya las elecciones generales, porque la imagen del Gobierno, después de las elecciones, está completamente deteriorada. Los analistas e inversores internacionales desconfian de unGobierno que ha perdido todo el poder territorial. Por eso, cuanto antes se produzca el relevo, mejor".

2-. Destapar el agujero real de las comunidades: Tras la experiencia de Cataluña, donde la derrota electoral del tripartito y el triunfo de CiU destapó que se había ocultado una quinta parte del déficit, la posibilidad de que surjan agujeros en otras comunidades es el punto que más preocupa ahora a los mercados y donde tienen centrada su atención.

"El problema de que no se hayan adelantado las generales es que ningún gobierno regional se va a atrever a aplicar medidas duras de ajuste, aunque destapen más agujeros, porque van a estar pensando en las generales de marzo. Esto nos va a hacer perder un año de tiempo", señala el economista de IE Business School, Rafael Pampillón.

De hecho, en su opinión, Zapatero debería haber hecho coincidir las generales con las autonómicas, para que así empezaran a aplicarse desde ahora todas las medidas de ajuste y reformas necesarias.

3-. Más reformas y medidas de ajuste: El tercer argumento a favor de adelantar las elecciones se basa en el convencimiento del mercado de que el PP aplicará más reformas y mayores medidas de ajuste. Como señala José Ramón Iturriaga, gestor de fondos de Abante, "un cambio de Gobierno ahora supondría un paso hacia adelante, porque iríamos hacia una política de corte más liberal".

No obstante, frente a estos argumentos, los expertos también esgrimen tres puntos que desaconsejan, por motivos económicos, adelantar las generales.

1-. Genera más incertidumbre: "Desde el punto de los mercados, no preocupan tanto las elecciones como saber cual es el verdadero nivel de déficit de las comunidades", señalaEstefanía Ponte, directora del departamento de Economía de Cortal Consors.

De hecho, considera que adelantar los comicios, cuando los inversores dan por descontado un cambio de Gobierno para dentro de menos de un año, sólo serviría para generar más incertidumbre, lo que perjudicaría al país. "Mantenerlas para marzo es lo más recomendable", subraya.

2-. Frenar las reformas pendientes: Como señaló Zapatero, España todavía tiene pendientes importantes reformas, como la negociación colectiva y la del sistema financiero. Esta última, además, es una prioridad para los inversores internacionales, que verían con muy malos ojos cualquier freno dentro del calendario previsto, que abarca hasta septiembre.

"Todavía falta por saber cómo entrará el Estado en las cajas que nacionalice, con qué valoraciones, bajo qué condiciones...", recuerda Iturriaga. Además, en julio se prevén las primeras salidas a bolsa de las cajas de ahorros, con Bankia a la cabeza, que se verían perjudicadas por la incertidumbre de un proceso electoral.

También podrían terminar en la basura todos los meses de negociación colectiva, ya que la expectativa de un nuevo Gobierno podría llevar tanto a patronal como a sindicatos a romper su actual intento de sellar un acuerdo, aunque sea de mínimos.

"Todos estos puntos hacen que no esté clara la conveniencia de adelantar las generales. Por eso, Zapatero ha cometido un error de libro al no haberlas hecho coincidir con las autonómicas, se habría evitado ahora esta situación", señala Pampillón.

3-. Paraliza el país durante varios meses: El economista de IE Business School pone el dedo en la llaga cuando insite en que las generales deberían haberse adelantado al pasado domingo. 

Primero, porque habría evitado la situación de falta de apoyo que vive ahora el Gobierno y la clave política en que se van a tomar todas las decisiones hasta marzo. Segundo, porque habría sido un ejercicio de austeridad, al haberse ahorrado el gasto que suponen dos procesos electorales.

Sin embargo, al no poderse ya volver hacia atrás, anunciar ahora un adelanto electoral sólo serviría para paralizar el país prácticamente hasta septiembre, ya que a la campaña electoral y al cambio de Gobierno le seguiría el verano y su cierre por descanso estival.

De ahí que ahora no sea recomendable adelantar los comicios, ya que la economía del país necesita adoptar decisiones, no paralizar cualquier movimiento hasta septiembre.

Por el momento, el mercado ha dado más la razón a quienes piensan que las elecciones apenas tendrán impacto en la economía y, por tanto, recomiendan esperar hasta marzo: la bolsa ignoró ayer los comicios autonómicos y el Ibex 35 fue el mejor índiceentre los indicadores de referencia del Viejo Continente.